La justicia determinó condenar a prisión perpetua al comisario Héctor Amarilla por el crimen de Nicolás Vázquez ocurrido en 2013. El acusado permaneció prófugo durante cinco años, motivo que fue considerado un agravante en la causa. La sentencia estuvo a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal de Lomas de Zamora luego del pedido de la fiscal Viviana Giorgi, quien fue la encargada de solicitar la reclusión perpetua.
El ex policía tenía un pedido de captura nacional e internacional desde el año 2014 y en el 2015 se sumó un ofrecimiento de recompensa para quien pudiera detallar en dónde se encontraba el prófugo. Finalmente fue detenido después de 5 años, en febrero de 2019 cuando apareció en Calzada a visitar a su hija.
Amarilla fue condenado por el delito homicidio doblemente agravado por alevosía y por su condición de funcionario policial. Aquel día de septiembre en el que Nicolás Vázquez perdió la vida, el entonces jefe de la comisaría 2 de Lanús, persigió al joven acusándolo del robo de una camiseta de fútbol. Sin dudarlo, apuntó y disparó en el cuello a la víctima provocándole la muerte inmediatamente.
