Más de 250 docentes de diversas carreras que integran la Agrupación Granate colmaron el Cine Universitario Tita Merello para participar de un encuentro con el rector Daniel Bozzani, la vicerrectora Georgina Hernández y el equipo de gestión de la Universidad.
Bozzani dio inicio a la jornada remarcando el papel esencial de los docentes, a quienes definió como “el magma que sostiene y anima nuestra institución”.
En un discurso cargado de emoción, el rector recordó la importancia de sembrar ideas y proyectos como apuesta al porvenir: “Plantemos semillas, algunas prosperarán y nos darán los frutos que anhelamos”. Asimismo, remarcó la urgencia de sostener la unidad y el diálogo para afrontar los desafíos que impone la coyuntura de ajuste que atraviesa la educación en el país.
El rector, quien también lidera la Agrupación Granate, realizó un repaso de los avances más recientes de la UNLa, mencionando la regularización de 86 docentes, la puesta en marcha de nuevos programas de doctorado y la expansión de espacios académicos, como aulas híbridas y áreas de trabajo mejor equipadas para el plantel docente.
Asimismo, puso en valor la importancia de la internacionalización: “Es indispensable proyectar nuestra universidad en el escenario global, siempre manteniendo el compromiso firme con nuestro entorno”.
Voces de la comunidad educativa
Los docentes asistentes celebraron el encuentro como un ámbito necesario para la articulación de acciones y el fortalecimiento del proyecto institucional.
Uno de los profesores presentes afirmó: “Este tipo de reuniones fortalecen el compromiso colectivo y nos permiten seguir creciendo juntos hacia el futuro”.
Otro de los docentes subrayó la importancia del intercambio fluido con las autoridades: “Es clave para consolidar una universidad que combine excelencia académica con responsabilidad social”. Una docente interina, visiblemente emocionada, expresó: “En tiempos de ajuste, la UNLa representa un refugio, un espacio de apoyo y contención para todos”.
Un proyecto que sigue avanzando
Bozzani clausuró el encuentro con un mensaje de esperanza, subrayando el poder transformador de la educación pública como instrumento de cambio social.
Finalmente, convocó a profundizar la unidad y el compromiso colectivo: “Nuestro proyecto es fruto de múltiples miradas que convergen hacia un mismo propósito: construir una universidad pública al servicio de su comunidad y con proyección global”.